Cuando Haben Girma se convirtió en la primera persona sordotecora en graduarse de la ley de Harvard, aprendí que yo también podría marcar la diferencia

Cuando Haben Girma se convirtió en la primera persona sordotecora en graduarse de la ley de Harvard, aprendí que yo también podría marcar la diferencia

Mis padres, como los tuyos, siempre me inculcaron que tenía que hacer algo más allá de lo que se esperaba de mí. Las expectativas de la sociedad no eran altas, pero las de mis padres (que nunca se graduaron de la escuela secundaria y soñaron que yo tendría lo que no podían) eran todo lo que necesitaba para seguir buscando oportunidades y superar obstáculos.

Desde el acceso a la información hasta la posibilidad de recibir una educación decente, los derechos para las personas con discapacidad en mi país, Uruguay, aún están lejos de ser completamente cumplidos. Cuando era pequeño, por ejemplo, mi madre aprendió Braille para que pudiera enseñarme a mí, y durante seis años, cuando estaba en la escuela primaria, ella transcribió todo mi trabajo para poder ser educado junto a mis vecinos compañeros. Pero no todas las familias tienen esa posibilidad, y la mayoría de ellas se quedan atrás y se convierten en parte de las estadísticas estadísticas que muestran que más del 35 por ciento de las personas con discapacidades en mi país no tenían acceso a ningún tipo de educación.

Mi deseo de cambiar las cosas y la comprensión de que podría ser posible no hubiera venido si no hubiera visto mi deseo de cambiar el mundo reflejado en todo lo que has hecho. Los cambios que hiciste ya son geniales. Pero los cambios por los que sin saberlo empujó, solo por cambiar las cosas y mostrar que otras personas pueden hacer lo mismo, fueron aún más lejos. Cuando te encontré, encontré un mundo en el que las personas con discapacidades ya no son simplemente presenciando nuestras historias, sino luchando por cambiarlas y mejorarlas, no solo para nosotros mismos, sino también para los demás. Un mundo lleno de mujeres empoderadas y fuertes que luchan por grandes causas y victorias ganadoras. Un mundo que, a toda costa, tenía que estar en.

Y así lo hice. A partir de ese momento, mi lucha por los derechos de las personas con discapacidades se hizo realidad. Comencé a dar conferencias a las organizaciones internacionales, para escribir artículos que traigan realidades ocultas a la luz, y para levantar mi voz con toda mi fuerza frente a un sistema que aún no está listo para nosotros.

Ese camino también me llevó a los 18 años a Harvard, ese lugar tan lejos e impensable para alguien como yo. Esa beca, que gané hace un poco menos de tres meses, no solo me dará la posibilidad de estudiar en una de las mejores universidades del mundo, sino que me permitirá abrir puertas para que otras mujeres con discapacidades puedan llegar a estos lugares. y convertirse en agentes de cambio en sus comunidades. Y mis logros, aunque son mi propio trabajo, también son gracias a ti y al camino que tus acciones me han marcado. Porque a veces es suficiente para mostrar lo que es posible cambiar el mundo.

Buscando más fuerte como ella? Echa un vistazo a estas cartas del defensor de las enfermedades crónicas Nitika Chopra, la periodista de transmisión ganadora del premio Mara Schiavocampo y el fundador de la cultura Chelsey Luger.