Qué hacer cuando todo se desmorona el día de la carrera

Qué hacer cuando todo se desmorona el día de la carrera

La mañana de nuestra carrera programada nos despertamos con las noticias que todos habíamos temido: la ultra carrera fue cancelada. Más de cinco pies de nieve habían caído en la montaña durante la noche y no era corriendo. Mi corazón se hundió, pero también me sentí aliviado de que corramos a una altura más baja, con temperaturas ligeramente más cálidas. Esta experiencia fue un claro ejemplo de un día de carrera que se desmorona, pero es cómo lo manejas lo que importa.

Si bien la decepción completa y total son sentimientos naturales, dejar de lado las cosas que no puedes controlar casi siempre ayuda a la decepción. Entonces, qué hacer cuando el día de la carrera se desmorona? Paso uno: respirar profundamente. Entonces, recuerda que no puedes controlar las cosas que no puedes controlar. Suena tan básico, pero pensar positivamente en la situación puede cambiar el juego. Recuérdate que habrá otra oportunidad para intentarlo de nuevo. Y, por último: aprovechar al máximo la situación, incluso si eso significa cambiar la distancia o la ruta.

Estas habilidades de afrontamiento son directamente transferibles a la mayoría de las situaciones que hacen que un día de carrera se desmorone. Cualquier cosa puede suceder. Puede caer enfermo, calambre en el curso, tener un mal funcionamiento de las zapatillas, no están mentalmente "todo allí" ese día. Cualquiera sea el caso, siempre habrá otra carrera, otra distancia, otro desafío. Se trata de tomar las cosas a medida que llegan y con calma.

Por cierto: Aquí está la diferencia entre la carrera de carreteras y el sendero, y si estás listo para comenzar a correr pero no tienes en un tiempo, entonces aquí es cómo volver a hacerlo.